MANUEL MONTILLA 2013-04-17 12:15:47
LUIS AGUILAR PONCE, SENSACIONES A PIEL RASGADA
La obra de Luis Aguilar Ponce es dentro del panorama plástico nacional de una singularidad prístina. Desde sus tempranas tintas y aerografías signa una corriente erótica el impulso generatriz de este artista. Es una visión propia y humana de las relaciones sexuales con un profundo estudio de los caracteres de sus personajes y un arriesgado uso del color y la línea.
IMÁGENES DE ALCOBA es un conjunto de 20 piezas de técnicas mixtas sobre papel que llevan adelante las investigaciones de Aguilar Ponce e imbrican lo espontaneo de un color en ejercicio sensorial y un grafismo que denota la certeza de conformaciones anatómicas ejecutadas con soltura, elegancia y maestría.
Aguilar Ponce nos enseña a descubrir cada nuevo recodo de piel, de sensualidad y de vivencias intensas, en un mundo donde el color eclosiona con una fuerza primigenia y voraz. Estas obras nos hablan de un artista en movimiento, que no ceja su lucha con la forma y el concepto, que encuentra en su hacer una riqueza de emociones tal que nos las transmite sin ambages y logra la razón primera del arte: comunicar.
Es interesante ver como, Aguilar Ponce, construye esos cuerpos en mixtura permanente, en tensión erótica activa, y como deconstruye las emociones que sus personajes externan, que esos cuerpos transmiten, que sus líneas concatenan en un grito silente y pleno de expectantes notas pasionales.
En algunos casos aparecen la soledad y las hendiduras por donde se fraccionan, escapan, esos mundos humanos en dispersión. Es entonces cuando el artista logra sus cotas más personales y donde se desnudan sus cercanías con esas sus creaciones, donde esas sensaciones a piel rasgada permiten vislumbrar una de las expectativas más plenas y más humanas: la esperanza.
Y es que Luis Aguilar Ponce es uno de nuestros artistas más perceptivos y logra transmitir, con sus creaciones, una identificación sensorial de los intersticios del alma humana, de sus pasiones, de sus urgencias y de sus aspiraciones. En alguna medida nos completa el camino que el poeta nos enuncia: “De no estar tú, / demasiado enorme / sería el bosque” (Haiku de Issa Kobayashi).
Manuel E. Montilla
10 de abril de 2013,
en algún lugar de Mesoamérica.