Angelglezz - 2008-02-20 00:00:00
Donde alguna vez hubo una puerta ya no la hay. Ahora no hay salida, ni por supuesto entrada. Dentro quedó todo.Es posible que al pasar al lado no miremos siquiera, no imaginemos que alguna vez hubo una luz, donde ya solo quedan paredes desnudas.
Suele ser complicado dejarlo todo para no volver. Suele ser contradictorio zanjar la cuenta pendiente y salir corriendo con el finiquito de la libertad.
Pero muchas veces es necesaria esta colisión contra el muro. Es el único modo.No se puede viajar con el lastre de una vida anterior. Hay que ser muy valeroso para llevar los bolsillos cargados con piedras desgastadas por el cansancio.
Tras las ruinas siempre queda la incertidumbre, esa cena copiosa que irrumpe recordándonos el exceso , esa cena que impide que seamos completamente felices con lo que fuimos y con lo que somos. Del futuro no hablo.