El retrato a niños es muy común, y con facilidad te regalan una sonrisa o un gesto de diversión y preocupación, a diferencia de otros lugares turísticos del estado, Tapachula ofrece un trato jovial, la gente es desinhibida, capaz de brindar una sonrisa y una foto con un poco de respeto y amabilidad, pero nunca faltan los vivales que se aprovechan de esta situación, y se dedican a retratar niños centroamericanos que piden limosna en los cruceros de autos, utilizándolos en trata sexual y pornografía infantil, manteniéndolos en malas condiciones.