Epona es la diosa celta de los caballos, la fertilidad, la naturaleza, la curación y el sueño eterno.
Como antiguamente se creía que los caballos guiaban las almas de uno a otro mundo, la importancia de esta diosa no sólo se debe al valor que los celtas atribuían a los caballos, en cuanto al transporte, la guerra, el poder, el prestigio y la religión, sino que también, refleja los profundos misterios de la vida, la muerte y del renacimiento.