Los lazos se han perdido por las costumbres actuales, por ejemplo antes el perro se enterraba con el dueño (ajuar funerario), con el fin de acompañar, guiar, y de ayudar a traspasar al mundo espiritual, en el presente pueden influir nuevas formas de ver al perro, pero nunca como se veía antes y la cercana fluidez de comunicación que tenían.