Esta obra es producto del proyecto común del Grupo de Amigos del Arte, bajo el titulo de “Sin Plenilunio no hay mar” iniciativa de Ana L. Moledo. Representa la luz de la luna vista desde las profundidades marinas, llenas de vida y misterio. Y dentro de ese misterio está el hecho de que dav Rubio y yo, hayamos llegado a una obra similar, como se puede comprobar en su página, sin comunicación previa. Aparte de otras posibilidades telepáticas como sugiere dav, lo que esta claro es la influencia del medio cultural en que nos movemos. Manolo López.