Manguito de la escuela, recuerdos, pensamiento latente, allí donde siempre el sueño está
Manguito de la escuela, recuerdos poderosos de una realidad del pasado que se evoca constantemente.
Manguito de la escuela, árbol entrañable que acompaña los paseos inmensos, promocionales y frondosos de una naturaleza impagable y potente.
La naturaleza preside nuestros recuerdos, manguito, escuela, libros, estudios, el árbol, óleo, colores intensos, conectando con la sensualidad de la vibración cromática, trabajando a la par con el tiempo pasado, con el espacio que se conserva en la retina de una capacidad intelectual avanzada, pero, siempre, en permanente dinámica transmutación.
Manguito de la escuela, recuerdos, pensamiento latente, allí donde siempre el sueño está. Manguito, árbol frutal, evocador de ensoñadoras meriendas, de colas para acercarse a todos los que se encuentran en la formulación de un recreo inmortal en el patio del colegio.
Recuerdos que invaden las estancias, unos haciéndose presentes, otros ausentes, los más dinamizan con la realidad a mansalva, en línea con la suma de las partes, de la vida galáctica, de la vía de las estrellas que se ensancha a medida que los conocimientos sinceros nos riegan en abundancia.
Joan Lluís Montané
De la Asociación Internacional de Críticos de Arte (AICA)