manuelmata - 2007-09-09 00:00:00
Mi comentario se dirige a esta escultura que para Rafael Piedehierro representa la humanidad en la acción de gritar y la espera de una solución.La poesía,el arte,el dibujo,la escultura,la musica... son buenos instrumentos para dialogar.Hace doce años escribí Grito Silencioso:
Unos ojos vacios,una boca abierta,
grito silencioso.
Unas manos presionando ferozmente sus oidos.
No puede sostenerse.
La palidez de su rostro,
reflejado por un horizonte lejano,
por no decir inexistente.
La perturbación de su alma,
se convierte en un movimiento involuntario,
doloroso.
Torsión aguda de su cuerpo que le hace
perder el equilibrio.
Compenetración con una naturaleza desvocada.
El corazón ha perdido toda esperanza.
La soledad reina tan dentro suya que la maldice.
Ya no puede ver más allá de si,
ni hablar en su idioma consigo mismo,
ni escuchar nada que apacigüe el sentido de su vida.
No quiere volver la mirada atrás,
porque no ve sombras,ni cielo,ni mar.
Percibe agresión,llamas de fuego y
mounstruos bañados de egoismo.
Distancia impenetrable que una tarde
se violó,con mil pinceladas.
Manuel Mata Gil
Salamanca,1995.