Esta composición se da en tres planos: un fondo neutro y claro que da entrada a el segundo plano, una vegetación espesa con flores que a pesar de ser tan densa no le quita protagonismo a las dos aves multicolores que se encuentran en el medio de la composición simétrica. Las cientos de pinceladas de colores dan origen al plumaje de las aves que dan armonía a la obra en conjunto.