LCivitico - 2008-08-13 00:00:00
tus obras tienen una luminosidad especial, y el manejo de las texturas es realmente una maravillosa constante es tus cuadros.,
felicitaciones.
Goyo - 2007-10-22 00:00:00
La realidad se esconde en la inocencia. Es lo inefable. La ciudad se despliega entre casuchas y calles sucias.
Las construcciones ulceran como lepra cianótica que deja su lividez. Algo se devora. Tal vez aquel fervor místico que impartía su fuerza a una naturaleza que rescataba su propia naturaleza.
La ciudad se enturbia y es incapaz de recobrar su perdida coloración. Todo se va. La entraña. También ella está condenada a perecer.
Extiendo sobre los muros una mirada exploradora.
Las dos ciudades se definen. La de los tugurios, la de los bares, la de los prostíbulos baratos. Y la otra. La fastuosa, la de los palacios. Los mármoles, los cristales, los bronces, las finas maderas. La de las luces y la flora.
Ambas se distancian y reúnen cuando el sol hunde su disco de fuego en un mar turquesa. La atmósfera es sensual y promisoria.
La vida nos deja innumerables minutos de contemplación que querrían ser eternos ante lo que se crea y construye, ante las metamorfosis que se encuentran en cada minuto. Esta es una de ellas. Viene el descanso.
Que nos acompañe duarnte nuestra ceguera.
pllinars - 2007-09-15 00:00:00
Se abre la luz tras el muro que parecia infranqueable. La vida es dura pero apasionante, toda una carrera de obstaculos, llena de compensaciones...
Felicidades Almudena.