Antonio_Guzzo - 2009-04-24 00:00:00

Decir María Aminta Henrich Nonone es decir Perú, decir ancestros, una sucesión de culturas que se remontan a un tiempo sin tiempo, que se pierden en la bruma y se extiende hasta el presente. 

Maria Aminta parte en sus obras desde la esencia del ser peruano, desde las Líneas de Nazca, desde las leyendas, desde la historia, la prehistoria, desde la antropología... Ruinas, ciudadelas... restos rupestres y cerámicos, artesanias. Todo ha volcado e irá volcando en sus telas con una visión creativa especial.
A Maria Aminta le abrieron la ventana para mirar su Perú y ella extendió su mirada y no dejó de mirarlo aún desde la lejana Alemania. Maria Aminta mantiene abierta por si esa ventana y sabe que nunca la ha de cerrar, incluso en los trances más difíciles en su devenir. 

Ella matiza todas sus creaciones con óleos sobre telas, es su fortaleza, su técnica esencial y fundamentalmente pinta, pinta con alma y crea con el corazón.

Aminta, en esta obra de 2007 de nuestra era, que contabilizamos con numeración arábiga, no solo nos muestra la piel de lo ancestral donde ve los orígenes mas cercanos: los precolombinos y los preincaicos sino que entra a navegar en un tiempo de pardos y ocres que intentan ocultar el origen, un tiempo que esta bajo la piel y se aventura en dicha odisea para beber de las esencias de los habitantes de estas tierras que no se dan por vencidos, no desaparecen... están y estarán para siempre donando su sangre a la tierra y a las generaciones que se reproducen en estos amplios dominios del sol ... 

El matizado, los perfiles, el naciente rojo desde la amazonia, es todo un conjunto que grita desde su interior ¡Perú!

María Aminta mantendrá siempre sus ventanas abiertas para indagar, para ver y mirar para expresar cuan profundo es lo que siente. Por ello a esta obra llamada “Sin titulo”
le adjunta el siguiente subtitulo

"Para encontrarse a si mismo hay que regresar a sus ancestros"