Con su característico ojo central, esta vez semejante al ojo de los ciclones en medio del mar, éste, por el contrario, parece el centro de una tormenta de arenas en medio del desierto. Qué podría significar más notablemente que esta obra, la vida sacrificada, el alma atormentada de los artistas? Décadas consumidas por el trabajo y la aridez de la soledad y sin embargo, un día, esas arenas calientes se topan con el mar, con la brisa y con la vida y se funden de tal manera que ya no se distinguen las aguas de las arenas en un remolino de amaneceres. Ud. ha hecho pacto con la belleza. Lo felicito. Un cordial saludo desde Miami, USA. |