Comentario realizado por: Gregorio Vigil-Escalera Alonso - 2007-05-11 00:00:00
Título obra: Luna mañanera - LUSEWICZ En esta obra cobra realidad la magia de Chagall con ese despliegue colorístico propio del expresionismo, pero de un expresionismo que no enlaza con la angustia ni con la ansiedad, sino con la irrealidad de lo real, con el lirismo del destino, con una naturaleza omnipotente, casi poseída de un sentido panteista. Campos, seres, casas y cielo que parece que instauran un paraíso perdido de la edad arcaica y que la artista lo crea modificando el orden de la perspectiva, atrayéndolo hacia nosotros, condensándolo, lo que aparentemente exige una amplio horizonte, un vasto plano que se extienda en el espacio. Pero no, al concentrarlo despierta una emotividad más pura, una acción embrujada sobre el espíritu. Obra que también puede vincularse al romanticismo, en su vertiente de misterio, de insondabilidad, de canto a la naturaleza y a la vida. La misma artista no deja lugar a dudas: la técnica y el procedimiento utilizados, con una disposición de los elementos que configuran el lienzo tan calculadamente concertados, convierten la materia en esa sutileza de significación que va más allá de su propia intencionalidad. En algún momento hasta lo místico aureola el conjunto, asoma como un fluido que lo quiere invadir por completo. Fantasía y magia. ¿Puede haber más? |