Vitor Moinhos fuga hacia un centro, un centro que está mas allá, al final y nos trae una cantidad de luz suficiente para llenar el espacio en naranjas y amarillos. Esa aceleración de colores que se nos acerca deja un espacio azaroso de suaves tonos pastel mas ellos también están en movimiento, un espacio necesario entre el foco y los reflejos que con rectas y curvas nos definen un momento de excitante indagación... tras el silencio habrán respuestas, |