La escultura es una representación de una figura en tres dimensiones. El objeto escultórico es por tanto sólido, tridimensional y ocupa un espacio. Para crear una escultura se quita materia de un bloque hasta obtener una figura. Por consiguiente, esculpir o tallar es quitar, y es escultor quien sabe quitar lo que sobra en un bloque, de material sólido, que contiene un objeto escultórico en potencia.
El escultor no puede operar valiéndose únicamente de la memoria; ha de tener a la vista un modelo. No es más que un punto de referencia, pero no puede prescindir de él si desea evitar errores irreparables. El modelo es parte del proceso que lleva a la idea final.
Pero también es escultor el modelador, el que efectúa un modelado, quien lo mismo que el pintor, agrega, valiéndose de un material blando (cera, arcilla, yeso). se podrá concebir sobre la marcha, e incluso cambiar el plan previsto. Tiene más libertad a la hora de hacer su creación.