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Biografia
Entrevista
Mireia Cifuentes
SU NUEVA SERIE: ‘CONTRASTE’
JUEGO ENTRE LA LUZ Y LA SOMBRA
Visito el estudio de Mireia Cifuentes, un refugio colorista, luminoso y mágico. La última serie de cuadros pintados protagonizan el ambiente: cuelgan de las paredes y posan sobre el mobiliario. Mis sentidos reconocen al instante la cualidad que tienen de otorgar al espacio gran vivacidad y una luz envolvente, abrumadora.
Su creación ha rebasado los límites, para expresar con ello, lo que aún no conocemos de nosotros mismos. Se ha mantenido fiel a su interior y, trascendiendo lo aprendido, lo ha plasmado con total libertad.
La obra de Mireia aligera sus lienzos de asuntos preconcebidos, de prohibiciones, protocolos, normas internas y externas, exime a sus pinceles y al lienzo de sus anteriores ataduras y compromisos. Su última obra refleja esta liberación y lo hace a través de una técnica directa, sin que haya espacio para un análisis o una premeditación que entorpecerían su diáfana y desprejuiciada mirada. Los nuevos cuadros, intensos, espontáneos, luminosos, expansivos, son también constructivos y armoniosos. Mas este equilibrio no es académico, obedece un equilibrio interno, a la conciliación de opuestos, a una visión superior.
Mireia parece adoptar una función de canal al expresar su contenido, mimetizarse con la pintura, alguien que deja que la creatividad pase por ella sin filtros, sin oponer resistencia. En este sentido, recuerdan sus pinturas al arte oriental que tanto aprecia la energía interna de las cosas, a las tempestades de W. Turner o al arte expresionista y espiritual de los primeros abstractos.
La pintora me invita a una taza de té y hablamos de su trabajo.
-Mireia, es evidente que, respecto a tus anteriores propuestas, existe un cambio formal y estilístico que orientan tu nueva obra –más emocional, directa e intuitiva– hacia la abstracción. Con sólo tres herramientas: amarillo, negro y gris logras múltiples sensaciones. ¿En qué circunstancias surgió este cambio de rumbo?
-Después de una época de intenso trabajo con una serie figurativa y varias exposiciones, necesitaba recuperar una expresión totalmente libre, dejar todo atrás. -Sonríe ampliamente.- Vacié por completo mi estudio y me quedé a solas con el lienzo en blanco. Permití por fin que pintara esa mano invisible que a veces escondemos por miedo al descontrol o a la censura, tanto propia como ajena. –Sorbe un poco de té y me mira directamente a los ojos.
-¿Recurrir al negro tiene algún significado?
-Es un color que apenas uso en mi pintura figurativa porque enturbia la pureza de las mezclas y crea tonos apagados, así que me resistía a utilizarlo, pero el deseo de crear un fuerte contraste con el amarillo era tan imperioso, que cedí, y yo misma quedé sorprendida con el resultado, una pintura que muestra las dos caras de la moneda y las conjuga resultando diferentes sabores.
En cuanto a un significado menos técnico, siempre me ha sugerido lo negativo, la sombra, lo oscuro de nosotros mismos, el miedo, la muerte. ‘Contraste’ se atreve a mostrar la luz y la oscuridad.
-Y no sólo los opuestos, también introduces un atenuador: el gris.
- ¡Es la ceniza de mi estufa de leña! pertenece a la casita de campo adonde a veces me retiro para estar en contacto con la naturaleza. Siempre me ha gustado experimentar con materiales, quería introducir un elemento totalmente orgánico que aportara textura a la tela y consiguiera unir dos colores tan opuestos. El resultado ha sido excelente porque ayuda a que lo cósmico e intangible de la atmósfera plasmada se materialice.
-¿Qué te gustaría suscitar con tu creación?
-Me alienta la idea de poder ofrecer una pincelada de inspiración a las personas que quieran sentirse conectadas con el flujo natural de las cosas. Proporcionar a sus ambientes un aire de armonía, ritmo, belleza, fuerza, equilibrio… o lo que motive cada lienzo en particular. ¡Escoge el tuyo!
- ¿Tienes perspectiva de seguir con este proyecto o está culminado?
-Efectivamente, existe una idea de completar esta serie con otras tres complementarias.
A raíz de que naciera ‘Contraste’, cuyos colores me inspiraron sensación de tierra, empecé a tener ganas de introducir el azul, lo que coincidió con la entrada del verano, por estar más en contacto con el agua. Sentí que el negro ya había cumplido su misión, pero no así el amarillo y la textura, de los que no voy a prescindir, por lo que sustituiré al negro por el azul de Prusia, que es en lo que estoy trabajando actualmente. Intuyo que después incluiré el blanco y el rojo, pues guardan relación con el aire y el fuego, así se cerrará el círculo con los cuatro elementos que componen nuestra naturaleza, pero prefiero no adelantarme a los acontecimientos, y dejaré que la pintura hable por sí misma.
-¡Te espera entonces un largo trabajo por delante! Una última petición: cuatro pinceladas que describan este camino andado.
-Es el fruto de un largo trabajo de búsqueda y experimentación, el cual me ha proporcionado mucho placer. A veces necesitamos el “Contraste” para confrontar lo que queremos con lo que no, y así poder elegir de entre ello. Si esta pintura aporta algo de alegría, valor o entusiasmo al espectador, habrá valido la pena.
La artista Mireia Cifuentes presenta una graduación armoniosa de lo más frío a lo más cálido, los sutiles cambios y la gran belleza de las formas creadas entre dos colores: el fuego y el hielo, el día y la noche, la plenitud y el vacío.
Fdo. Carlota Márquez
SU NUEVA SERIE: ‘CONTRASTE’
JUEGO ENTRE LA LUZ Y LA SOMBRA
Visito el estudio de Mireia Cifuentes, un refugio colorista, luminoso y mágico. La última serie de cuadros pintados protagonizan el ambiente: cuelgan de las paredes y posan sobre el mobiliario. Mis sentidos reconocen al instante la cualidad que tienen de otorgar al espacio gran vivacidad y una luz envolvente, abrumadora.
Su creación ha rebasado los límites, para expresar con ello, lo que aún no conocemos de nosotros mismos. Se ha mantenido fiel a su interior y, trascendiendo lo aprendido, lo ha plasmado con total libertad.
La obra de Mireia aligera sus lienzos de asuntos preconcebidos, de prohibiciones, protocolos, normas internas y externas, exime a sus pinceles y al lienzo de sus anteriores ataduras y compromisos. Su última obra refleja esta liberación y lo hace a través de una técnica directa, sin que haya espacio para un análisis o una premeditación que entorpecerían su diáfana y desprejuiciada mirada. Los nuevos cuadros, intensos, espontáneos, luminosos, expansivos, son también constructivos y armoniosos. Mas este equilibrio no es académico, obedece un equilibrio interno, a la conciliación de opuestos, a una visión superior.
Mireia parece adoptar una función de canal al expresar su contenido, mimetizarse con la pintura, alguien que deja que la creatividad pase por ella sin filtros, sin oponer resistencia. En este sentido, recuerdan sus pinturas al arte oriental que tanto aprecia la energía interna de las cosas, a las tempestades de W. Turner o al arte expresionista y espiritual de los primeros abstractos.
La pintora me invita a una taza de té y hablamos de su trabajo.
-Mireia, es evidente que, respecto a tus anteriores propuestas, existe un cambio formal y estilístico que orientan tu nueva obra –más emocional, directa e intuitiva– hacia la abstracción. Con sólo tres herramientas: amarillo, negro y gris logras múltiples sensaciones. ¿En qué circunstancias surgió este cambio de rumbo?
-Después de una época de intenso trabajo con una serie figurativa y varias exposiciones, necesitaba recuperar una expresión totalmente libre, dejar todo atrás. -Sonríe ampliamente.- Vacié por completo mi estudio y me quedé a solas con el lienzo en blanco. Permití por fin que pintara esa mano invisible que a veces escondemos por miedo al descontrol o a la censura, tanto propia como ajena. –Sorbe un poco de té y me mira directamente a los ojos.
-¿Recurrir al negro tiene algún significado?
-Es un color que apenas uso en mi pintura figurativa porque enturbia la pureza de las mezclas y crea tonos apagados, así que me resistía a utilizarlo, pero el deseo de crear un fuerte contraste con el amarillo era tan imperioso, que cedí, y yo misma quedé sorprendida con el resultado, una pintura que muestra las dos caras de la moneda y las conjuga resultando diferentes sabores.
En cuanto a un significado menos técnico, siempre me ha sugerido lo negativo, la sombra, lo oscuro de nosotros mismos, el miedo, la muerte. ‘Contraste’ se atreve a mostrar la luz y la oscuridad.
-Y no sólo los opuestos, también introduces un atenuador: el gris.
- ¡Es la ceniza de mi estufa de leña! pertenece a la casita de campo adonde a veces me retiro para estar en contacto con la naturaleza. Siempre me ha gustado experimentar con materiales, quería introducir un elemento totalmente orgánico que aportara textura a la tela y consiguiera unir dos colores tan opuestos. El resultado ha sido excelente porque ayuda a que lo cósmico e intangible de la atmósfera plasmada se materialice.
-¿Qué te gustaría suscitar con tu creación?
-Me alienta la idea de poder ofrecer una pincelada de inspiración a las personas que quieran sentirse conectadas con el flujo natural de las cosas. Proporcionar a sus ambientes un aire de armonía, ritmo, belleza, fuerza, equilibrio… o lo que motive cada lienzo en particular. ¡Escoge el tuyo!
- ¿Tienes perspectiva de seguir con este proyecto o está culminado?
-Efectivamente, existe una idea de completar esta serie con otras tres complementarias.
A raíz de que naciera ‘Contraste’, cuyos colores me inspiraron sensación de tierra, empecé a tener ganas de introducir el azul, lo que coincidió con la entrada del verano, por estar más en contacto con el agua. Sentí que el negro ya había cumplido su misión, pero no así el amarillo y la textura, de los que no voy a prescindir, por lo que sustituiré al negro por el azul de Prusia, que es en lo que estoy trabajando actualmente. Intuyo que después incluiré el blanco y el rojo, pues guardan relación con el aire y el fuego, así se cerrará el círculo con los cuatro elementos que componen nuestra naturaleza, pero prefiero no adelantarme a los acontecimientos, y dejaré que la pintura hable por sí misma.
-¡Te espera entonces un largo trabajo por delante! Una última petición: cuatro pinceladas que describan este camino andado.
-Es el fruto de un largo trabajo de búsqueda y experimentación, el cual me ha proporcionado mucho placer. A veces necesitamos el “Contraste” para confrontar lo que queremos con lo que no, y así poder elegir de entre ello. Si esta pintura aporta algo de alegría, valor o entusiasmo al espectador, habrá valido la pena.
La artista Mireia Cifuentes presenta una graduación armoniosa de lo más frío a lo más cálido, los sutiles cambios y la gran belleza de las formas creadas entre dos colores: el fuego y el hielo, el día y la noche, la plenitud y el vacío.
Fdo. Carlota Márquez