Gisèle Corboud, la emblematicidad del dibujo
27 de Mayo del 2008 a las 22:33:33 0 Leído (476)
Domina el dibujo con naturalidad, buscando la percepción del sentir antes que la intelectualización de la composición. Se concentra en el desnudo femenino, exhibiendo la fuerza de la sensualidad, la expresividad sutil de lo efímero, preocupándose en captar los instantes, imbuirse en los fenómenos de la esencialidad, en el sentido de atrapar la ansiedad, la efervescencia contenida, dibujando situaciones de melancolía, deseo, espera paciente o tristeza perfectamente calculadas.
Es una creadora que plasma la belleza, que indaga en la fenomenología de lo estético, en el sentido de apoyar un cierto despunte de una determinada investigación onírica, pero, sin entretenerse en la escritura automática ni tampoco interesarse por lo surreal. Amante de la composición, abraza sus personajes como si fueran auténticos símbolos; producto de momentos, que surgen con aparente facilidad buscando el sitio adecuado en el escenario.
Domina la técnica del dibujo, siendo perfeccionista, mostrando su determinación por el detalle, el interés por acabar ciertas zonas con un máximo de información, mientras que, en otras, establece una representación más a grandes trazos. De esta manera su creación es libre, transmite fuerza, es generosa con los espacios, empleando el color con determinación y en contadas ocasiones.
No describe sus personajes femeninos, sino que desnuda el alma de los mismos. Pretende ser una artista que capta la esencia, que vive el momento, que genera pasión hacia el cambio y el gesto.
En su obra no hay hieratismo, tampoco decadencia, sino una profunda y serena firmeza que se propaga de forma generalizada, como si tratara de inocularnos un mensaje inmortal que permanece al margen del paso del tiempo.
Posee una intencionalidad evidente en determinar el fin último, en conceptuar la idea que define la principal baza que juegan sus personajes, que son, distintas facetas de la conciencia, del ‘yo’, subyugado a los vaivenes de los deseos, porque anhelar es buscar aquello que es evidente, pero convirtiéndolo en determinante como fin en sí mismo.
Gisèle Corboud acierta en sus dibujos, porque se interesa por la capacidad de evocación, mostrando interés por lo alegórico, facilitando la vertiente fundamental del arte que es la creación en su estado puro, sin intermediarios y sin buscar el aplauso del público.
Joan Lluís Montané
De la Asociación Internacional de Críticos de Arte
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