Desde muy temprana edad, LOREM siente
una especial atracción por la pintura y el dibujo.
Sus primeras pinceladas, con tan solo
trece años, le llevarán adentrarse en un
mundo artístico que lo fascinará e impulsará
a desarrollar y cultivar las más diversas
técnicas, pero problemas económicos le
impiden cursar estudios de pintura, si bien
cursará estudios de Delineación, Proyección
y Diseño.
Sus comienzos se centran en el lápiz, haciendo un
recorrido por las técnicas
del carbón, plumillas y tinta al pincel.
Su primera exposición tendrá lugar en Pontevedra
en el año 1992.
En el año 1995 retoma sus estudios de arte perfeccionando,
durante dos años, las técnicas de óleo y acuarela.
Será a partir de aquí, cuando LOREM, tras las innumerables
muestras de aprobación decidirá volver a mostrar sus creaciones,
en un primer momento en su ciudad natal, en los meses de Junio
y Agosto de 1997 y ya posteriormente por parte de nuestra geografía
nacional.